El molino de café casero sin recelo es un gran opción para tener en casa pensando en la molienda del café diario.
Es una gran idea disponer de una para llevarla cuando vayas a hacer un viaje.
Es la elección más cómoda para cualquier método de preparación como cafeteras por goteo, filtrado, prensa francesa, etc.
Si bien el post no es una relación de los mejores molinos de café caseros con enlaces a Amazon o similar, sino una reflexión sobre la necesidad de tener uno en casa si no dispones un molino profesional que te permita moler el café en el grado de molienda ideal para la cafetera que vas a utilizar.
Y unos consejos sobre los elementos básicos sobre los que preguntar si vas a comprar uno.
Si no tienes un molino profesional es la mejor opción. La opción de tener un molino profesional es una opción limitada a profesionales o personas con un alto poder adquisitivo por el precio que alcanzan estás máquinas.
¿POR QUÉ ES BUENO MOLER EL CAFÉ?
El grano de café recién molido siempre será mucho el aroma y sabor a los que puedes conseguir en una tienda ya molidos previamente.
Más sabor, más aroma, el café en granos conserva mejor todas sus propiedades organolépticas.
Esto es debido a que el café molido tiene más superficie de contacto con el aire y entonces comienza a oxidarse y a perder propiedades. Al café le afecta directamente el contacto con el aire, la luz, las altas temperaturas y los olores inmensos. Ya desde que se tuesta empieza a perder cualidades, y esa pérdida se multiplica en el momento en el que se muele el grano. Con un molino de café casero nos aseguramos la máxima frescura al instante para disfrutar de nuestra bebida, evitando la pérdida de aroma y sabor que sufre el café molido
Si a esto unes acudir a cafés tostado en un buen tostadero profesional que te venda un café actual tostado..