Se trata de un buen antioxidante que trabaja en unión a la Vitamina E y que puede ser empleado en alguna de estas patologías.
Envejecimiento prematuro, en unión a las vitaminas A, C y E. Enfermedades articulares, unido al cobre.
Enfermedades cardiovasculares, asociado a la vitamina E.
Distrofias musculares progresivas o traumáticas, asociado a la vitamina E.
Caída de cabello, junto a vitamina B, zinc y silicio.
Como preventivo del cáncer o en una fase precoz.
Infecciones frecuentes o graves, unido a las vitaminas A y C.
Síndrome de inmunodeficiencia.
Prostatitis y adenoma de próstata, unido al zinc.
Enfermedades que cursan con procesos inflamatorios.
Infertilidad masculina en unión al zinc.
Intoxicaciones por metales pesados.
Poca elasticidad de músculos y tendones.
Cataratas incipientes.
Fibrosis cística
Épocas de fuerte entrenamiento deportivo.
Como corrector de los efectos secundarios de los rayos X y las radiaciones ultravioletas.
Para prevenir las intoxicaciones por prótesis dentarias metálicas.