Favorecen la ingestión de los alimentos secos. En este grupo se encuentran los aceites, las nueces, los cacahuetes, las almendras dulces, la mantequilla y la margarina.
No coma lo que todo el mundo sabe que no es saludable, aunque esté muy sabroso.
Los más perjudiciales y que son consumidos habitualmente son el azúcar blanco, el alcohol (también cerveza o vino), el café y las comidas fritas en aceites recalentados.
El azúcar en sí mismo no es perjudicial, tal y como nos lo ofrece la naturaleza, bien sea con la remolacha, la caña de azúcar, la miel, los dátiles o las uvas, entre otros, son altamente benéficos para la salud y su consumo no causa enfermedades.
Solamente cuando la mano del hombre modifica un alimento, blanqueándolo, purificándolo y separando sus componentes, es cuando se convierte en perjudicial.
Esto mismo es lo que ocurre con la sal marina, un nutriente que ocupa el tercer puesto en nuestras necesidades vitales, después del aire y el agua, y que a causa de una mala información la gente ha pasado de considerarla un aliado para la vida a prescindir de ella en las comidas. La importancia de la sal marina, tal y como se encuentra en el mar, es tanta que antiguamente se pagaba a los obreros con su peso en sal, de ahí la palabra Salario.
Y sobre la carne, la explicación es bien sencilla: nadie puede vivir comiendo exclusivamente carne, pero todos podemos vivir perfectamente comiendo solamente vHegetales.
Coma tantos cereales integrales como le sea posible, evitando el azúcar blanco y los hidratos de carbono refinados. Los alimentos, lo más próximos a como la naturaleza nos los proporciona.
Nutrientes naturales o químicos
Muchas personas están convencidas que las vitaminas deben ingerirse de fuentes orgánicas, no mediante la forma artificial lograda en un laboratorio. Ciertamente, es creíble que los nutrientes naturales aportan otra serie de virtudes, como magnetismo, vibraciones o resonancias, además de otros componentes, logrando entre todos un perfecto equilibrio. Con los nutrientes naturales sabemos que casi nunca habrá excesos o intolerancias, pero podríamos recomendar los preparados químicos cuando se necesiten dosis altas imposibles de i